martes, 24 de noviembre de 2015

Comienzo un blog en 2015 ¿por qué y qué va a ser?

Porque hace tiempo que me pide el cuerpo llevar algo parecido a un diario de los contenidos a los que me voy enganchando y desenganchando, además de escupir algo de opinión sobre ellos. Ni siquiera tiene por qué leerlo nadie, me lo planteo como algo mayormente reflexivo y subjetivo que para cualquier otro individuo, es muy probable que carezca totalmente de interés. Por si fuera poco, dispongo de poco tiempo y eso da para muchos menos contenidos de los que me gustaría consumir.

"Si lo haces para ti, escribe un diario" diría cualquiera. Me lo he planteado pero al mismo tiempo, no puedo negar que algunos de los productos en los que estoy pensando, no quiero quedármelos para mí. Hay algunos que quiero recomendar, y para los que este medio me ha parecido adecuado, ya que, entrada tras entrada, se puede conformar una impresión o mapa de gustos o tendencias que, con la afinidad suficiente, puede dar peso a una determinada recomendación. Cuando surja, que será, con toda seguridad, en alguna de las primeras entradas, lo explicaré con más detalle.

El detonante ha sido un brevísimo zapping en el que me he topado con esa basura de sobremesa en la que me niego a basar la primera entrada, pero me ha gritado: "¡Vamos! ¡Sabes que te apetece escribir!"

Mi anterior blog es de hace unos 10 años y no tenía ni intención ni periodicidad. En esta ocasión me propongo escribir algo cada semana y tengo una idea clara de los temas que quiero tratar. Cada poco tiempo me topo con algún producto que me llama poderosamente la atención y para el que lamento no tener más tiempo. Se va a tratar simplemente de recopilarlos aquí y poder recordarlos cada cierto de tiempo en los arrebatos de nostalgia. También, quizás, me sirva de excusa para hacer listas, porque me encanta hacer listas. Hago muchas pero nunca son suficientes. Quiero hacer listas de mis tops de esto y de aquello, quiero hacer mis tops de fin de año y compararlos con las docenas de tops de fin de año que me encuentro por ahí.... Suena a que puede que resulte divertido hacerlo. ¿Leerlo? Ni idea. No me cierro ni a feedback, ni a cambiar de planteamiento con el tiempo, ni a nada que lo pueda hacer más interesante sin restarle ese planteamiento de disfrute personal.

¡Vamos a ver qué sale!